El dolor lumbar o de espalda es de las patologías musculoesqueléticas que más afecta a la población.
Las Guías Europeas de Salud definen el dolor lumbar como: "Dolor y disconfort localizado por debajo de las costillas y por encima de los pliegues glúteos, con o sin dolor hacia la parte posterior del muslo. Se estima el 84% de la población sufrirá algún episodio de dolor lumbar a lo largo de su vida. El 13,8% de la población sufrirá de dolor lumbar crónico. El 40-80% vuelve a sufrir un episodio de dolor lumbar tras haber tenido uno en el primer año.
Clasificación del dolor lumbar o de espalda.
Existen dos tipos de dolor lumbar. Por un lado, tenemos el dolor lumbar específico
que es el 10-20% de los casos. Este dolor se deriva de procesos patológicos que requieren atención médica como puede ser una fractura vertebral o un proceso tumoral (El profesional fisioterapeuta realizará un cribase de los síntomas por si es tu caso, te derivará a un profesional médico). Por otro lado, tenemos el dolor lumbar inespecífico, que es el que más afecta a la población siendo un 80-90% de los casos. Este dolor es de origen multifactorial, es decir que son muchas las posibles estructuras implicadas, entre ellas encontramos la articulación vertebral, el disco, la musculatura especifica de la zona, etc.
Ambos términos son utilizados por toda la población y todos sabemos que cuando alguien nos habla de ellos se refieren a dolor de espalda o lumbar, pero ¿Qué son?.
En primer lugar, la ciática como generalmente la conoce la población, es un dolor desde el glúteo hacia la rodilla incluso hacia el pie, por la parte posterior de esta. Normalmente es un término mal utilizado ya que no es así. La ciática o mejor dicho el dolor ciático, es un dolor con origen en el nervio ciático, uno de los principales nervios del cuerpo, este sale de la zona lumbar baja y llega hasta la punta de los dedos. Este dolor se origina por una compresión a nivel vertebral por una hernia, por compresión a su paso por alguna zona como puede ser la zona piramidal o por sensibilización de la estructura nerviosa. Este dolor de origen nervioso además se caracteriza por ir acompañado de calambres y hormigueos por la pierna, perdida de fuerza y otras alteraciones de la sensibilidad. Cuando la población habla de ciática se refiere generalmente a un dolor irradiado por algún tejido que puede ser músculo, articulación etc. Este tipo de dolor irradiado se encuentra dentro del dolor lumbar inespecífico, mientras que el dolor de origen nervioso es un dolor lumbar inespecífico que necesitará de la valoración tanto del fisioterapeuta como del médico especialista.
En segundo lugar, el término lumbago es ampliamente utilizado por la población. Este término normalmente hace referencia a un dolor lumbar agudo. Normalmente los pacientes describen este dolor como un latigazo o un pinchazo mientras se agachaban a recoger un objeto del suelo o al incorporarse. El origen de este dolor es musculoesquelético, en el que entran juego tanto las musculatura que normalmente se ve especialemente afectada, como otras estructuras. Esta musculutarua se acompaña de una debilidad de base por falta de ejercicio específico de la zona que la predispone a sufrir de estos episodios. El lumbago o dolor lumbar agudo también puede acompañarse de dolor hacia la pierna por la sensibilización de la musculatura.
Tratamiento Fisioterapéutico.
Antes de realizar cualquier tratamiento, el/la fisioterapeuta deberá realizar una exhaustiva valoración, donde examinará los diferentes síntomas y signos. Tras esto, el tratamiento de fisioterapia se basará en un primer lugar en el control del dolor utilizando para ello diferentes técnicas como es la Fisioterapia Manual o ejercicios de baja carga. En segundo lugar y tras controlar el dolor se llevará a cabo una fase de activación de la musculatura de manera controlada. Por último, se llegará a la última fase, la de fortalecimiento y acondicionamiento donde se prepara al paciente para desarrollar una mayor fuerza y control de la su zona lumbar con el objetivo de evitar recaídas y poder realizar sus actividades diarias sin dolor y sin miedo a sufrir otro episodio.